Sociedad Iberoamericana
de Información Científica


Volumen 1, Número 4, Junio 2003

 Expertos Invitados


ASOCIACION ENTRE TABAQUISMO PASIVO Y ASMA BRONQUIAL EN NIÑOS DE 2 A 14 AÑOS

Dr. Olimpio Rodriguez Santos

Columnista Experto de SIIC
Dr. Olimpio Rodríguez Santos

Especialista de l l Grado en Alergología. Investigador Agregado. Hospital Pediátrico Provincial «Eduardo Agramonte Piña», Camagüey, Cuba.

en colaboración con la doctora
Rebeca M. San Juan Blanco, Especialista de l Grado en Alergología. Hospital «Calixto García», La Habana, Cuba.

Otro trabajo publicado: Rodríguez Santos O: «Ensayo clínico diagnóstico en adultos con extracto alergénico de Dermatophagoides siboney», www.siicsalud.com/dato/dat028/0260 4012.htm
La Habana, Cuba (especial para SIIC)
El riesgo de asma pediátrica crece al aumentar la cantidad de cigarrillos consumidos en el hogar y el número de fumadores activos convivientes.


RESUMEN

Antecedentes. El tabaquismo pasivo ha sido relacionado con exacerbación del asma bronquial en niños. Método. Estudio retrospectivo de casos y con- troles en asmáticos de 2 a 14 años que asisten a la consulta de Alergología del Servicio de Alergia Pediátrica de Camagüey. Seleccionamos a 200 asmáticos, la mitad de evolución inestable (casos) y el resto de evolución estable (controles). Se realizó una encuesta entre los pacientes de ambos grupos y se midieron las varia- bles «consumo de medicamentos» y «calidad de vida». Se valoró a los expuestos al humo del tabaco y a los no expuestos. En los hogares de expuestos se determi- naron además la cantidad de fumadores y el número de cigarrillos consumidos du- rante el día. Resultados. El consumo de esteroides fue superior en los ex- puestos (razón de ventajas [RV] = 9.61; intervalo de confianza del 95% [IC 95%], 4.80-19.22). La calidad de vida fue peor también en los expuestos (RV = 18.86; IC 95% 8.96-39.70. En los hogares donde fuma la madre, el padre y otro familiar hubo incremento del riesgo (RV = 4.50; IC 95%, 2.46-8.23), así como en los hogares donde se fuman más de 40 cigarrillos (RV = 5.02; IC 95%, 2. 72-9.28). Conclusiones. El riesgo de asma pediátrica crece al aumentar la cantidad de cigarrillos consumidos en el hogar y el número de fumadores activos convi- vientes.

INTRODUCCION

El asma afecta a personas de todas las edades, y la causa principal es la enferme- dad crónica en la infancia.1 Se ha definido en términos fisiológicos como un estado de hiperrespuesta de las vías aéreas.2 La hiperrespuesta se manifiesta como broncoconstricción después del ejercicio y la exposición natural a olores fuertes o humos irritantes tales como el dióxido de sul- furo, el humo del tabaco o el aire frío.1.

Entre los diversos factores desencadenantes o agravantes del asma, el tabaquis- mo ocupa un lugar preponderante. La aspiración del humo del cigarro altera los procesos de purificación pulmonar y provoca cambios de los espacios alveolares así como la destrucción de los tabiques alveolares. La transformación del epitelio mucoso (que cubre internamente los bronquios y los bronquiolos y convierte el teji- do de cilindrocelular en planocelular) también contribuye a la aparición de células bronquiales atípicas, elevada secreción de flema, inflamación, hipertrofia de la musculatura lisa, estrechamiento y destrucción de las vías respiratorias menores, y alteraciones inmunológicos que reducen las funciones defensivas del organis- mo.3 Todas las funciones fisiológicas se encuentran significativamente disminuidas en los fumadores; su capacidad vital es de 400 a 600 ml menor que la no fumadores.

El asma bronquial aparece entre los fumadores como consecuencia de sensibilidad aumentada al tabaco, y durante ello desempeña un papel esencial el espasmo bronquial permanente, que se refuerza bajo la acción del humo4 El humo puede separarse en una fase gaseosa y otra sólida o particula- da.5 La fase particulada contiene nicotina, agua y alquitrán y la fase gaseosa, monóxido de carbono, anhídrido carbónico, óxidos de nitrógeno, amonía- co, nitrosaminas volátiles, cianuro de hidrógeno, alcoholes, aldehídos y cetonas.

La nicotina es el componente más importante por su gran cantidad de acciones farmacológicas complejas y marcada toxicidad. Una fracción significativa de nicoti- na inhalada es metabolizada en el pulmón. Los principales metabolitos de la nicoti- na son la cotinina y la nicotina-1-N-óxido, que se forman respectivamente por oxi- dación del carbono alfa y por N-oxidación del anillo de pirrolidina. La excreción uri- naria de cotinina y la exposición al humo de tabaco ambiental se asocian con mor- bilidad pulmonar en niños con asma.6,7 Las madres que fuman du- rante el embarazo incrementan el riesgo de asma en sus hijos8 con significativo aumento de la concentración de IgE sérica en los recién naci- dos.9 Estos niños, si siguen expuestos al humo del tabaco durante la primera infancia, manifiestan síntomas de asma en edades tempranas de la vida.

Por otro lado, la eficacia de las intervenciones para evitar el hábito de fumar du- rante el embarazo se evidencia en el menor riesgo de los niños de padecer la en- fermedad.10 Los infantes que viven con padres fumadores presentan crisis recurrentes de asma con más frecuencia que los que conviven en un am- biente donde no se practica este hábito.11-17 La cantidad de cigarri- llos crece con el riesgo,18,19 y cuando los familiares dejan de fumar las crisis de los niños asmáticos que conviven en esos hogares se hacen menos severas y frecuentes.20 En nuestro municipio, los niños fumadores pasivos conforman un grupo significati- vo. Ello provoca en la población de asmáticos elevado consumo de medicamentos y asistencia a los servicios de salud, lo cual constituye un serio problema en aten- ción primaria. El presente trabajo tiene el objetivo de conocer la eventual asocia- ción de este factor de riesgo con el asma bronquial.

MATERIAL Y METODO

Se realizó un estudio de casos y controles en 200 niños asmáticos moderados y severos según consenso internacional,21 con edades comprendidas entre 2 y 14 años para un nivel de confianza del 95%. Eran residentes de la cabe- cera municipal de Camagüey y asistíaan regularmente a la consulta de Alergología de esta localidad. Se consideraron casos los asmáticos que en el período de un año habían tenido evolución inestable; y controles aquellos de evolución estable en el mismo período, acorde a definiciones operacionales establecidas. La muestra estuvo representada por 100 casos y 100 controles. Se administró una encuesta para la recolección de la información en ambos grupos. La cantidad de cigarrillos que se consumían diariamente en los hogares de fumadores se determinó según la escala:

  • Menos de 20 cigarrillos.
  • De 20 a 40 cigarrillos.
  • Más de 40 cigarrillos.

     

El parentesco del fumador activo con el niño asmático quedó establecido con el método siguiente:
  1. Madre fumadora.
  2. Padre fumador.
  3. Otro familiar fumador.
  4. Madre y padres fumadores.
  5. Madre, padre y otros familiares fumadores.

     

El número de ingresos hospitalarios durante el año que precedió a la ejecución del cuestionario fueron recuperados del registro de admisión y el archivo del hospital. El consumo de broncodilatadores y esteroides se recogió de la historia clínica.


Definiciones operacionales

  • Inestables (casos) . Asmáticos clasificados como moderados o severos que presentaron síntomas recurrentes de asma a pesar de haber cumplido con el tratamiento intercrisis.
  • Estables (controles) . Asmáticos clasificados como moderados o severos que no presentaron síntomas recurrentes de asma y cumplían el trata- miento intercrisis.
  • Consumo de broncodilatadores. Pacientes que consumían broncodilatadores de forma permanente y durante 6 o más meses en el año.
  • No consumo de broncodilatadores. Pacientes que consumían broncodilatadores de forma intermitente y durante menos de 6 meses en el año.
  • Consumo de esteroides. Pacientes que consumían corticoste- roides sistémicos a diario o más frecuente de lo estipulado según consenso inter- nacional para el tipo de asma.
  • No consumo de esteroides. Pacientes que no consumía corti- costeroides sistémicos.
  • Mala calidad de vida. Todo paciente que presentaba la carac- terística siguiente:
    •    respuesta no óptima a la terapia del asma
    •    dificultad para comer, dormir, caminar, hablar
    •    usualmente agitado, confundido, somnoliento o con pérdida de la conciencia
    •    aumento de la frecuencia respiratoria por encima de 40 por minuto
    •    retracciones suprasternales torácico abdominales y movi- miento paradójico por empleo de los músculos accesorios (escaleno y esternoclei- domastoideo)
    •    presencia de sibilancias o ausencia en paro respiratorio inminente
    •    pulso por minuto mayor de 120 o bradicardia en paro respi- ratorio inminente
    •    espiración con los labios fruncidos y aleteo nasal
    •    cianosis, miosis, papiledema y alteraciones sensoriales

  • Buena calidad de vida. Paciente activo en el ejercicio que ob- tiene control de los síntomas, puede prevenir las exacerbaciones, no presenta reacciones adversas de los medicamentos y es capaz de dormir toda la noche.
RESULTADOS

Entre los 200 niños asmáticos había 124 del sexo masculino y 76 del femenino, de edades promedio 9.7 y 8.9 años, respectivamente. Presentaban asma moderada 154 y severa 46.

El consumo de broncodilatadores fue similar en los expuestos y en los no expues- tos al humo del cigarro (razón de ventajas [RV] = 1.83; intervalo de confianza del 95% [IC 95%], 0.83-4.07). Sin embargo, el consumo de esteroides fue superior en los expuestos que en los no expuestos al factor de riesgo (RV = 9.61; IC 95%, 4.80-19.22).

La tabla 1 muestra que 72% de los niños con mala calidad de vida están expuestos al humo del tabaco ambiental, contra 12% de los que tienen buena calidad de vida (RV = 18. 86; IC 95%, 8,96-39.70).



Con relación a la asociación del factor de riesgo en los casos y controles, se ob- serva en la tabla 2 que 72% de los primeros están expuestos al humo del tabaco contra 16% en los controles (RV = 13.50; IC 95%, 6.77-26.92).


La asociación entre el parentesco, cantidad de cigarrillos que se fumaban en el hogar durante el día y la exacerbación del asma bronquial en los niños se expresa en la tabla 3, donde se aprecia que cuando fumaba la madre, el padre y otro fami- liar el riesgo de asma era mayor (RV = 4.50; IC 95%, 2.46-8.23). También fue ma- yor el riesgo de exacerbación de las crisis en los niños que vivían en un hogar donde se fumaban más de 40 cigarrillos en el día (RV = 5.02; IC 95%, 2.72-9.28)






DISCUSION


Un número cada vez mayor de infantes acude a las consultas por crisis recurrentes de asma bronquial, sin que los familiares se percatan de la relación que puede existir entre el tabaquismo del adulto y la enfermedad del niño. Justamente, la pre- vención de éste y otros factores de riesgo constituye la piedra angular del trata- miento de la enfermedad. Mucho se ha escrito sobre la influencia de los compo- nentes del tabaco en los fumadores activos y en los pasivos. Chilmo- nezy16 comunicó niveles de cotinina en orina de 5.6 ng en niños que no habían estado expuestos al humo del cigarro, y de 55.8 ng en los que habían estado expuestos.

En nuestra investigación se demuestra que los niños expuestos al humo del tabaco presentan mayor probabilidad de tener crisis de asma más graves y frecuentes que los no expuestos. Los resultados son congruentes con los obtenidos en investiga- ciones realizadas en la provincia Camagüey18 y con los informes de autores de otros países, que también encuentran una relación directamente pro- porcional entre la cantidad de cigarrillos consumidos en estos hogares y la mala calidad de vida de los pacientes.19 La relación se ha puesto de mani- fiesto, además, en investigaciones que muestran cómo el contacto directo de la madre y el niño hace más grave aún la relación entre el fumador pasivo niño y el fumador activo madre.20 En conclusión, la cantidad de cigarrillos consumidos en el hogar y el número de fumadores que conviven con el niño de- mostraron guardar relación directa con el riesgo; es decir, su aumento conlleva incrementos en el riesgo para la salud del niño.

BIBLIOGRAFIA

     
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LOS AVANCES RECIENTES EN EL TRATAMIENTO DEL ASMA Y LAS ALERGIAS PEDIATRICAS

 


Dr. Antonio Nieto García

Investigador de la Unidad de Alergología Infantil, Hospital La Fe, Valencia. Presidente del Paediatric Respiratory & Allergy Meeting – PRAM-2002
Valencia, España (especial para SIIC)
El doctor Antonio Nieto García, quien presidirá el encuentro PRAM- 2002, explicó que ”la alergia es un problema que, en gran medida, comienza a generarse en la infancia, la niñez y la adolescencia. Por ello, los pediatras dedicados a estos temas tenemos una responsabilidad ineludible en el desarrollo de estrategias preventivas”. El experto respondió a las preguntas de la doctora Rosa María Busquets Monge sobre los temas que se tratarán en el encuentro, y sobre los desafíos actuales en esta especialidad. La Sociedad Iberoamericana de Información Científica (SIIC) auspicia el Paediatric Respiratory & Allergy Meeting – PRAM-2002, por considerarlo de interés científico para los profesionales e instituciones de la salud de habla hispana y portuguesa. Para obtener más información sobre este encuentro consulte la página < http://www.siicsalud.com/dato/dat029/02717004.htm>.

El encuentro PRAM-2002 se desarrollará entre el 21 y el 23 de noviembre de 2002 en Valencia. Los expertos participantes, de todo el mundo, presentarán los avances más recientes en el estudio del asma y las alergias pediátricas, así como las novedades en el tratamiento de estas enfermedades.

El doctor Nieto García, quien presidirá el encuentro, es un especialista en alergología pediátrica, y ha publicado numerosos trabajos científicos, en revistas como Journal of Pediatrics, Annals of Allergy y Journal of Investigational Allergy and Clinical Immunology.

La doctora Busquets Monge entrevistó a este especialista. Es Médica Adjunta del Servicio de Pediatría y responsable de la Unidad de Neumología Pediátrica del Hospital del Mar, de la Universitat Autónoma de Barcelona, y Consultora Experta de SIIC ( http://www.siicsalud.com/dato/dat029/02613001.htm).

SIIC: El remodelado de las vías aéreas produce cambios estructurales que son la causa de la cronicidad del asma. Si podemos eliminarlos o reducirlos, nos encontramos ante la posibilidad de impedir la progresión y cronicidad del asma. ¿Cree usted que la medicación corticoidea debe instaurarse de forma precoz, una vez se ha establecido el diagnóstico del asma y aunque la gravedad del cuadro, en este momento, se considere intermitente leve?

Dr. Antonio Nieto García: En mi opinión, convendría matizar alguna de las consideraciones previas que se hacen en esta pregunta. Por ejemplo, habría que decir que no es el remodelado lo que causa la cronicidad del asma, sino más bien que la persistencia y severidad de la inflamación subyacente pueden inducir lesiones estructurales irreversibles de la vía aérea. En todo caso, esta es una eventualidad poco frecuente, y no existe evidencia publicada que muestre que los niños con formas leves de asma tengan riesgo de “remodelarse”. De hecho, los resultados del estudio Melbourne (el estudio prospectivo a más largo plazo publicado hasta la fecha en pacientes asmáticos), en el que se evalúa la evolución natural del asma en pacientes seguidos desde la infancia hasta los 42 años, así parecen confirmarlo.

No obstante, la instauración precoz de un tratamiento antiinflamatorio sería recomendable, incluso en niños con asma episódico frecuente. Ahora bien, no tendría por qué ser con corticoides inhalados. En ese sentido, creo que existe el concepto erróneo de identificar “antiinflamatorio” con “corticoide inhalado”. A mi juicio, un tratamiento antiinflamatorio es toda aquella estrategia terapéutica capaz de prevenir o revertir la inflamación, cualquiera que sea el mecanismo a través del cual esto pueda ser logrado. Así, son también antiinflamatorios las medidas de control ambiental, la inmunoterapia, las cromonas, los antileucotrienos, etcétera.

Es bien cierto que los corticoides son los antiinflamatorios más potentes, pero tienen inconvenientes que condicionan su uso en niños: uno es el problema con el cumplimiento inherente a toda medicación inhalada, y otro es la posibilidad de que induzcan el desarrollo de efectos secundarios, lo cual constituye una posibilidad infrecuente, pero no excepcional.

Por otra parte, los resultados del Estudio CAMP recientemente publicados cuestionan la posibilidad de que el uso de corticoides inhalados tenga realmente efectos preventivos en el desarrollo del remodelado. Por consiguiente: tratamiento antiinflamatorio en asma leve, sí; tratamiento con corticoides inhalados, no necesariamente; tratamiento de entrada con corticoides inhalados en niños con asma leve, no.

SIIC: ¿Está de acuerdo con los últimos estudios que nos indican que la exposición precoz a gatos y perros disminuye el riesgo de sensibilización alérgica a dichos animales a la edad de 6 o 7 años?

A.N.G.: En Alergología se conoce que, en términos generales, dosis bajas e intermitentes inducen sensibilización, mientras que dosis altas persistentes inducen tolerancia. En este sentido, las posibilidad de que una exposición masiva a alergenos desde edades muy tempranas, antes de que la sensibilización alérgica se haya desarrollado, pueda tener efectos protectores no resulta descabellada.

 

En todo caso, esta es una posibilidad que debe ser confirmada por estudios adicionales.

 

SIIC: ¿Cuál es su opinión sobre las evidencias que sugieren que una infección temprana por el virus respiratorio sincicial aumenta el riesgo de desarrollar enfermedad reactiva de las vías aéreas durante la niñez? Los mecanismos propuestos para esta relación incluyen la desregulación inmune, y un control neural anormal. Estas interacciones explican en parte la inflamación de las vías aéreas observada tras la infección, pero ¿podemos decir que las bronquiolitis son un factor de riesgo para producir asma?

A.N.G.: El papel de los virus en la génesis del asma constituye uno de los asuntos más interesantes al que nos enfrentamos los que nos dedicamos a este tema. De hecho, una de las Sesiones del Paediatric Respiratory & Allergy Meeting (PRAM-2002) tiene este asunto como tema central.

Por una parte, no hay dudas sobre el papel de los virus como desencadenantes de exacerbaciones en niños asmáticos; se sabe que más del 80% de las crisis de asma en la infancia tiene como factor desencadenante una infección viral. Lo que resulta más oscuro es el papel de los virus en la etiología del asma, y en este sentido, el papel del virus respiratorio sincicial parece más determinante que el de otras familias virales.

De todas formas, la evidencia científica existente induce la controversia: el estudio de cohorte que se lleva a cabo en Tucson (Arizona) sugiere que el envío de los lactantes a la Guardería desde edades muy tempranas puede tener un efecto protector en el desarrollo ulterior de asma.

Por lo tanto, es seguro que la exposición a virus influye de alguna forma en el desarrollo del asma infantil; sin embargo, su papel, así como su importancia relativa, pueden variar considerablemente dependiendo de numerosos factores: el tipo de virus, la edad de exposición, el nivel de exposición, la incidencia en un niño con asma ya desarrollado o no, la predisposición genética, etcétera.

SIIC: Los niños asmáticos muestran una concentración de óxido nítrico exhalado elevada, con respecto a la población sana. La medición de esta concentración puede ser un medio para monitorear la inflamación bronquial y valorar la eficacia de los tratamientos antiinflamatorios. ¿Cree que a pesar del precio del medidor, sería necesario adoptarlo como medida de rutina?

A.N.G.: Se conoce que el sustrato fisiopatológico del asma es la inflamación bronquial. El problema es que la inflamación asmática constituye un proceso muy complejo, y muy variable entre pacientes; diferentes tipos celulares, y diferentes mediadores, citoquinas, moléculas de adhesión, quemoquinas, etcétera, están involucrados de manera muy irregular dependiendo de numerosos factores tales como la edad, la etiología, la gravedad.

 

No obstante, es indudable que el monitoreo de la inflamación constituye un objetivo crucial desde el punto de vista diagnóstico, terapéutico y pronóstico. Varios métodos directos o indirectos tratan de analizar de la forma más incruenta posible esta cuestión: la función pulmonar, la cuantificación de la hiperreactividad bronquial, la medición de la proteínas eosinofílicas, la cuantificación del óxido nítrico exhalado, el análisis del condensado exhalatorio, etcétera.

 

Sin embargo, es probable que cada uno de estos métodos refleje aspectos parciales del proceso inflamatorio. En el caso de la determinación del óxido nítrico exhalado, parece tratarse de una técnica que aporta interesante información. Pero dada la cuantiosa inversión que hay que realizar para la adquisición del aparato, no está suficientemente clara su rentabilidad en términos de relación beneficio – costo, respecto a su aplicación en la clínica cotidiana.

 

SIIC: Los factores genéticos no pueden explicar el rápido aumento que se ha observado recientemente en la incidencia de enfermedades atópicas. Los cambios que han tenido lugar en el cuidado materno, entre ellos un aumento en la tasa de cesáreas, podría disminuir la exposición microbiana inicial alterando el desarrollo de células T helper 1 y 2, con riesgo de desarrollar atopía. Un estudio reciente demuestra que la incidencia acumulativa de asma a la edad de 7 años era significativamente más alta en niños nacidos por cesárea ¿Cuál es su opinión y su experiencia en este tema?

A.N.G.: En efecto, no es verosímil suponer que en 4 o 5 décadas se hayan producido cambios genéticos de tal magnitud que hayan sido capaces de multiplicar por 2 ó por 3 la prevalencia de las enfermedades alérgicas en países industrializados. Por lo tanto, lo más razonable es atribuir a factores de tipo ambiental este espectacular incremento.

Sin embargo, tampoco es asumible atribuirlo a un único factor. Probablemente una combinación de diversos factores ambientales pudiera explicar de forma plausible estos hechos. En todo caso, es probable que, en su mayoría, todos esos factores actúen de forma coordinada en el sentido de inducir una consolidación de las respuestas Th2 de bajo nivel, que son “fisiológicas“ durante la vida fetal y el período neonatal inmediato. Por ello, la falta de un adecuado estímulo Th1 en fases tempranas de la vida extrauterina podría ser decisiva para el desarrollo de problemas alérgicos ulteriores.

Es posible que el mecanismo a través del cual el parto por cesárea pueda influir en el desarrollo de alergia tenga que ver con esto. No obstante, también en este aspecto la bibliografía médica es controvertida. Habrá que esperar nuevos estudios de cohorte que lo aclaren.

SIIC: ¿Qué novedades se presentarán en este encuentro en lo que atañe a la inmunoterapia?

A.N.G.: De acuerdo con el Position Paper de la OMS sobre Vacunas contra las Enfermedades Alérgicas, la inmunoterapia es el único tratamiento capaz de modificar el curso natural de dichas enfermedades. Muy recientemente, los datos del estudio PAT, publicados en el Journal of Allergy and Clinical Immunology, ratifican este aspecto, puesto que confirman que el uso precoz de inmunoterapia en niños en fases muy tempranas de la enfermedad alérgica respiratoria (cuando únicamente tienen síntomas de vías altas) es capaz de impedir en gran medida la progresión hacia las vías bajas, hacia el desarrollo de asma.

Por otra parte, la inmunoterapia es un tratamiento capaz de impedir accidentes fatales como consecuencia de la alergia a veneno de himenópteros. Por lo tanto, la inmunoterapia tiene un papel clave en el control de la alergia, especialmente la alergia respiratoria y la alergia a insectos.

Obviamente, es un tratamiento mejorable; nuevos métodos de estandarización, nuevos alergenos, nuevas vías y nuevas pautas de administración, son temas que se discutirán en el encuentro PRAM-2002. Asimismo, se presentarán datos muy novedosos acerca de futuras formas de inmunoterapia que se están investigando (inmunoterapia con péptidos, inmunoterapia con plásmidos, etcétera) con el objetivo de conseguir una inmunoterapia más eficaz y más segura.

SIIC: ¿Qué logros le gustaría ver alcanzados en los próximos años en el tratamiento de las alergias infantiles?

A.N.G.: Naturalmente, que fuéramos capaces de hallar una estrategia de prevención capaz de evitar el comienzo o, en su defecto, el desarrollo de la marcha alérgica. Para lograrlo, será necesario un enorme progreso en el conocimiento de la intrincada red de mecanismos inmunológicos responsables de las respuestas alérgicas, y de los mecanismos que interrelacionan éstas con otras respuestas inmunes.

La alergia es un problema que, en gran medida, comienza a generarse en la infancia, la niñez y la adolescencia. Por ello, los pediatras dedicados a estos temas tenemos una responsabilidad ineludible en el desarrollo de estrategias preventivas. Y por ello también, encuentros como el PRAM-2002, con especialistas de todo el mundo compartiendo conocimientos y experiencias al respecto, son imprescindibles. Animo a todos los interesados a consultar el programa de este evento, y a acudir a Valencia los próximos 21 a 23 de noviembre de 2002.


Trabajos Distinguidos, Serie Alergia e Inmunología, integra el Programa SIIC-Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC) de Educación Médica Continua


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