Irak: expnasión de la Covid-19 sobre una población con solo 1% de vacunados
Agencia Sistema de Noticias Científicas (aSNC), Bagdad, Irak 15 Julio, 2021

Desde que en marzo comenzó el lanzamiento de la vacuna, las autoridades sanitarias iraquíes completaron la inoculación a solo alrededor del 1% de los 40 millones de habitantes del país.

Irak, marcado por la guerra, padece miles de nuevos casos de Covid al día, pero pocas personas usan mascarillas y aún menos están vacunadas, lo que genera temores de una "catástrofe epidemiológica".

Los trabajadores de la salud dicen que están luchando no solo contra la pandemia, sino también contra un escepticismo generalizado sobre las vacunas, debido a la desinformación y la desconfianza pública en el estado.

La economía iraquí dependiente del petróleo todavía se está recuperando de décadas de guerra e insurgencia; en un cuadro de limitaciones generalizadas, el país registra más de 1,4 millones de casos de Covid y más de 17.000 muertes.

Pero en toda la capital, tanto el uso de máscaras como las restricciones se relajaron de manera notable.

Sarmad al-Qarlousi, director del Hospital Al-Kindi de Bagdad, opinó que el país se encamina hacia una "catástrofe epidemiológica" a menos que se incremente la cantidad de vacunados.

"Hemos entrado en la tercera ola y debemos prepararnos", dijo. "Tratamos de controlar el desastre; aconsejamos a las personas que se vacunen".

Campaña de desinformación
Las 54 camas de la unidad de cuidados intensivos del hospital Al-Kindi estuvieron ocupadas a pleno durante el año y hay una larga lista de espera.

El portavoz del Ministerio de Salud iraquí, Saif al-Badr, culpó de la vacilación general para vacunarse a una "campaña de desinformación que precedió a la llegada de la vacuna".

La gente tiene miedo
Irak ha ordenado hasta ahora 18 millones de dosis de varias vacunas, incluidas AstraZeneca y Pfizer / BioNTech.

Según los informes del Ministerio de Salud, hasta el momento no se registraron casos de la variante Delta pese a que circula en el vecino Irán y muchas otras partes del mundo.

Kholoud al-Sarraf, decano de la facultad de farmacología de la Universidad Al-Esraa de Bagdad, no se mostró tan optimista y abogó por un cierre de dos semanas para detener el aumento de casos. También instó a intensificar los esfuerzos para convencer a los iraquíes de que se vacunen.