Médicos sin Fronteras insta a Pfizer y Moderna a compartir de inmediato los conocimientos para la producción de vacunas
Médicos sin Fronteras, Ginebra, Suiza 26 Agosto, 2021

Tras la reciente aprobación total de la vacuna COVID-19 de ARNm de Pfizer-BioNTech por parte de la Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU. (FDA), la asociación internacional Médicos Sin Fronteras (MSF) volvió a llamar a Pfizer y Moderna a compartir de inmediato la tecnología y el conocimiento de las vacunas con los fabricantes del continente africano para impulsar el suministro mundial de vacunas.

MSF solicita además que efectúen la cesión a través del centro de transferencia de tecnología de vacunas de ARNm de la Organización Mundial de la Salud (OMS) alojado en Sudáfrica.

Con solo el 1,7% de la población de África totalmente vacunada, el aumento y la diversificación de la producción y el suministro de vacunas de ARNm a través de fabricantes adicionales, comenzando con los de países del continente africano, ofrece una oportunidad para abordar de manera urgente y sostenible la inequidad de las vacunas durante esta pandemia y en el futuro.

"Definir la capacidad de fabricación de vacunas de ARNm en África es absolutamente posible. Nuestro análisis muestra que si toda la tecnología y la capacitación necesarias se compartieran abiertamente al menos siete fabricantes de países africanos cumplirían actualmente los requisitos previos para producir vacunas de ARNm", afirmó Lara Dovifat, directora Campaña de Acceso de MSF.
“De hecho, desde julio de 2020, observamos que Pfizer-BioNTech y Moderna facilitan en 8 meses la producción de vacunas de ARNm con fabricantes de Suiza, España y Alemania, por lo que es claramente factible que otros fabriquen vacunas de ARNm. La única razón por la que estas vacunas no se producen más ampliamente es porque Pfizer-BioNTech y Moderna se niegan a compartir la información y tecnología de sus vacunas ARNm con los fabricantes, incluidos los de Egipto, Marruecos,Sudáfrica y Túnez, en condiciones de elaborar hasta 100 millones de dosis al año en un plazo de 10 meses".


Los costos y ventas de vacunas
En un análisis del Imperial College of London encargado por MSF, el costo total estimado necesario para iniciar la producción de vacunas ARNm en una sitio de fabricación existente y elaborar 100 millones de dosis es de aproximadamente 127 millones de dólares para la vacuna de BioNTech-Pfizer y 270 millones de dólares para la de Moderna.
Si el análisis tiene en cuenta los $ 2.5 mil millones de dinero público invertido en el desarrollo de vacunas de ARNm, y los ingresos por ventas previstos para 2021 (US$26 mil millones y US$19 mil millones para Pfizer-BioNTech y Moderna, respectivamente), estas empresas tienen la obligación pública de facilitar el aumento de la producción de vacunas. y suministrarlas siempre que sea posible.

En la actualidad, solo el 1% de las dosis de vacuna de Pfizer-BioNTech fueron administradas a países de ingresos bajos (0,1%) y de ingresos bajos y medios (0,9%). *
Dado que los países de África históricamente importan el 99% de las vacunas que suministran, la dependencia claramente insostenible para un continente de 1.200 millones de personas.

“Como vemos en los lugares donde trabajamos, depender casi por completo de las importaciones y donaciones erráticas demostró ser insuficiente para el acceso a las vacunas en el continente africano”, dijo el Dr. Khosi Mavuso, representante médico de MSF en Sudáfrica.

“A medida que en África surgen nuevas variantes y continúa la muerte de personas por COVID-19 a un ritmo alarmante, la visible escasez de vacunas es motivo de creciente preocupación. Este sufrimiento podría aliviarse si las compañías farmacéuticas compartieran la tecnología de ARNm y los conocimientos necesarios para producir más vacunas COVID-19.

Las vacunas de ARNm son una nueva herramienta médica revolucionaria que salva vidas; sus cualidades ofrecen ventajas para su uso y fabricación en países de ingresos bajos y medianos: en comparación son más simples, rápidas y baratas de producir que las vacunas tradicionales; relativamente fáciles de escalar en la producción y con altas posibilidades de adaptación a nuevas variantes.

Como ventaja adicional, la tecnología de ARNm es adecuable a otros patógenos, es decir, la misma plataforma se puede 'cambiar' para producir diferentes vacunas o terapias para otras enfermedades, incluida la preparación a futuras pandemias.  

“Apoyar la capacidad de fabricación de vacunas independiente y sostenible en un país africano solo requeriría la transferencia de tecnología de Pfizer-BioNTech y Moderna, pero cambiaría las reglas del juego para el acceso equitativo a las vacunas para las personas en países de ingresos bajos y medianos”, dijo la Dra. Carrie Teicher , Director de Programas, MSF-USA.
“El gobierno de EE. UU. debe instar de inmediato a Pfizer-BioNTech y Moderna a compartir la tecnología y el conocimiento de la vacuna de ARNm de COVID-19. Realmente es una obviedad: la decisión aumentará la producción y el suministro global de vacunas COVID-19, salvando vidas en esta y futuras pandemias”.

* Información basada en datos de AirFinity, 22 de agosto de 2021