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EE.UU.: creció la ´inseguridad alimentaria´ en la mayoría de los hogares con niños
Nutrition Journal, EE.UU. 5 Octubre, 2021

La inseguridad alimentaria (IA) se incrementó en Estados Unidos. Pese a que el problema aumentó en casi todos los hogares del país aquellos con niños se vieron más desfavorecidos.

Una encuesta en línea por redes sociales realizada en Estados Unidos reveló un incremento de la IA en los hogares del país. 

Los datos se recolectaron en abril del año 2020, con el inicio de la pandemia, y se compararon con la información existente previa a la aparición de la COVID-19.

El estudio recién se publicó el 30 de agosto último en la revista Nutrition Journal.

Los autores, investigadores de la Universidad de Nueva York, recibieron el apoyo del Department of Agriculture (Departamento de Agricultura) de Estados Unidos para la confección de un cuestionario de seis ítems que remitieron a los encuestados.

De las 250 701 personas que recibieron la encuesta 5 606 respondieron el cuestionario  en su totalidad. El 25 % de la muestra correspondía a hogares con niños.

Para analizar la prevalencia de la IA, se tuvieron en cuenta no solo los datos concretos proporcionados por la encuesta en línea sino que se analizaron también en modelos multivariables. 

Fue así que los investigadores pudieron vincular el estado laboral de los encuestados, el grado de ingreso económico de cada hogar y el nivel educativo de los adultos de la familia.

Además, Niyati Parekh, uno de los autores, profesor asistente de la Escuela de Salud Pública de la New York University (Universidad de Nueva York), aclaró que la evaluación de IA utilizada trascendió la definición tradicional del concepto de IA. 

En este sentido explicó que no se trató solo se considerar las calorías ingeridas, sino también el valor nutricional de los productos consumidos habitualmente. Parekh opina que la IA no siempre se relaciona con la desnutrición y el hambre. 

Los hogares con menos ingresos suelen tener dietas basadas en alimentos de baja densidad nutricional por ser más baratos, factor que puede conducir al sobrepeso y a enfermedades metabólicas asociadas.

En términos numéricos, la encuesta determinó que 14,7 % de los participantes se declaraban en estado de IA. Pero al segregar los datos según la composición del hogar, el porcentaje se elevaba al 17,5 % entre los hogares con niños, marcando una diferencia significativa con los datos correspondientes a 2019. 

Antes del inicio de la pandemia por COVID-19 en Estados Unidos se calculaba el 11 % de hogares en IA. 

El desempleo, la disminución del nivel educativo máximo alcanzado en la etapa secundaria y los bajos ingresos económicos fueron factores directamente asociados a los hogares con IA.

Como propuesta para avanzar hacia estrategias que afronten esta realidad, la Escuela Pública de Nutrición de Nueva York creó una aplicación móvil denominada Food2Share. Su objetivo es conectar a hogares que padecen IA con locales gastronómicos en condiciones de proveerles alimentos. 

Gracias al aporte de donantes los platos se ofrecerían gratis o con grandes descuentos en los precios de lista.

Los restaurantes en riesgo de cierre por las restricciones sanitarias obtendrían nuevos ingresos, a la vez que se ayudaría a la población expuesta a los efectos de la malnutrición. 

Los autores consideran que los datos aportados por la encuesta indican una exacerbación de la IA durante la pandemia y que su estudio representa orienta investigaciones adicionales e intervenciones urgentes dirigidas a subgrupos vulnerables que padecen la grave situación social descripta.

Las políticas proteccionistas y de nacionalismo alimentario destinadas a promover las asociaciones locales entre agricultores y las redes de distribución de alimentos -así como los incentivos gubernamentales para los agricultores- son clave para construir un sistema alimentario que enfrente la adversidad y promueva la salud. 

Los esfuerzos de recuperación de alimentos y la reducción de sus desperdicios para desviarlos como comidas para las familias es otra vía en la que la política de salud pública puede reducir en forma notable la inseguridad alimentaria. Los mercados digitales y la tecnología móvil pueden ayudar a ampliar estos esfuerzos. 

Las intervenciones de alfabetización nutricional (definidas como la competencia y habilidades necesarias para evaluar críticamente la información alimentaria y nutricional a la que están expuestas las personas) y la alfabetización mediática relacionada (definida como la capacidad cognitiva para reconocer y evaluar los mensajes de los medios en torno a los alimentos) son dos estrategias que en vez de pasarse por alto deben contemplarse para reducir la IA. 

Además, los profesionales de la salud deben hacer hincapié en evitar los alimentos altamente procesados y poco saludables que no se pueden almacenar, teniendo en cuenta el acceso a los alimentos o las limitaciones económicas y el empeoramiento que no solo enfrentan las personas durante la pandemia, sino también los bancos de alimentos y los programas alimentarios comunitarios. 

Por último, para los autores lo más importante es que la IA está asociada con la obesidad; aunque no hay pruebas concluyentes, su creciente prevalencia durante la pandemia también amenaza con aumentar la obesidad pospandémica. Por ejemplo, en la ciudad de Nueva York, el Bronx tiene la mayor prevalencia de hambre junto con una alta de obesidad y factores de riesgo cardiovascular; en forma concomitante, el Bronx es una comunidad en riesgo de complicaciones del COVID-19 relacionadas con la obesidad. 

Por lo tanto, en comunidades vulnerables es imperativo aplanar en paralelo la curva de inseguridad alimentaria con la de COVID-19 como estrategia para la prevención de la obesidad.


* Nutrition Journal 
Food insecurity among households with children during the COVID-19 pandemic: results from a study among social media users across the United States, (2021)
Niyati Parekh et al
30 de agosto, 2021
DOI: 10.1186/s12937-021-00732-2