Los países de la Unión Europea (UE) deberían comenzar ahora su aplicación de refuerzos contra la Covid-19 para contener la nueva ola de infecciones que aguardan para este otoño e invierno boreal, agravados por las restricciones energéticas y las tarifas prohibitivas que limitan los consumos de gas y electricidad de la población.
La Comisión Europea con sede en Bruselas dijo que casi 10.000 personas por mes continuan muriendo de Covid-19 en el bloque, mientras que otras consecuencias negativas para la salud de la enfermedad incluyen síntomas de Covid prolongados y problemas mentales.
“Los últimos dos años han demostrado que la UE podría enfrentar otra ola de Covid-19 este otoño e invierno [boreal]”, dijo la Comisión, ya que el regreso a las escuelas y el clima más fresco empujan a las personas al interior, lo que ayuda a que la gripe estacional también se propague.
“La vacunación sigue siendo la forma más confiable de evitar enfermedades graves y, por lo tanto, reducir la mortalidad por Covid-19”, dijo, y pidió a los 27 estados de la UE que preparen campañas de vacunación, incluidas aplicaciones adaptadas a las nuevas variantes.
La Agencia Europea de Medicamentos (EMA) aprobó el 1º de septiembre los refuerzos de BioNTech-Pfizer y Moderna actualizados para las nuevas variantes de Covid-19.
“Es esencial continuar priorizando la aceptación de la vacunación primaria y la primera dosis de refuerzo entre todas las personas elegibles”, dijo la máxima funcionaria de salud de la UE, Stella Kyriakides, en respuesta a la decisión de la EMA.