Resúmenes amplios

DURANTE LAS MEDIDAS DE CONTROL DE LA ENFERMEDAD POR CORONAVIRUS 2019 SE REGISTRÓ UN NÚMERO ELEVADO DE CONTACTOS DE SOCIALES EN TODOS LOS PAÍSES AFRICANOS


London, Reino Unido
El número de contactos sociales durante la pandemia de enfermedad por coronavirus 2019 ha sido elevado en todos los países africanos, con grandes variaciones entre países.

BMC Medicine 20(1):10-13

Autores:
Dobreva Z

Institución/es participante/s en la investigación:
London School of Hygiene and Tropical Medicine

Título original:
Characterising Social Contacts Under COVID-19 Control Measures in Africa

Título en castellano:
Caracterización de los Contactos Sociales Bajo las Medidas de Control de COVID-19 en África

Extensión del  Resumen-SIIC en castellano:
1.93 páginas impresas en papel A4

Introducción

Se han registrado más de 352 millones de casos y 5.6 millones de muertes por enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19, por sus siglas en inglés) en todo el mundo hasta el 24 de enero de 2022. La carga relativamente baja de COVID-19 en África en comparación con Europa y América del Norte se ha atribuido, en parte, a factores demográficos como poblaciones más jóvenes y ubicadas en zonas más rurales, diferencias en la capacidad de detección de casos y muertes, y factores ambientales como temperaturas más altas, así como la experiencia previa de los países con enfermedades propensas a brotes. Al principio de la pandemia de COVID-19, los países adoptaron intervenciones no farmacéuticas, como bloqueos y confinamiento, para limitar la transmisión del coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2, por sus siglas en inglés). Los estudios de contacto social ayudan a medir la eficacia de las intervenciones no farmacéuticas y estiman los parámetros para modelar la transmisión del SARS-CoV-2. Sin embargo, se han realizado pocos estudios de contacto en África.

El propósito de la presente investigación fue describir y cuantificar los contactos sociales de muestras representativas a nivel nacional de los Estados miembros de la Unión Africana recopiladas del 4 al 17 de agosto de 2020 y del 8 al 25 de febrero de 2021.

Métodos

Se analizaron datos de encuestas transversales representativas a nivel nacional de 19 Estados miembros de la Unión Africana, recopilados por la Partnership for Evidence-based Responses to COVID-19 (PERC) mediante entrevistas telefónicas en dos momentos (agosto de 2020 y febrero de 2021). Los encuestados adultos informaron contactos realizados el día anterior por grupo de edad, características demográficas y actitudes hacia la COVID-19. Un contacto se definió como “cualquier persona con quien [el encuestado] intercambió al menos unas pocas palabras y estuvo lo suficientemente cerca como para no tener que levantar [su] voz o [con quien] tuvo contacto físico directo con (incluido el apretón de manos u otro contacto)”. Se describieron las medias y las medianas de los contactos a través de estas características y los contactos relacionados con los informes de movilidad e índice de rigurosidad para cada país en los dos momentos.

Resultados

Se analizaron 23 940 encuestados y 563 976 contactos en los 18 países para la primera encuesta y 25 640 encuestados y 607 142 contactos en los 19 países para la segunda encuesta. La mayoría de los países tenían una tasa de participación de al menos el 30%. Las poblaciones muestreadas siguieron una estructura de edad similar en todos los países en ambas encuestas. En la mayoría de los países, los encuestados tenían educación primaria, secundaria o terciaria.

La media de contactos informados varió entre los países, con el más bajo informado en Etiopía (media: 9, mediana: 4) en agosto de 2020 y el más alto en Sudán (media: 50, mediana: 33) en febrero de 2021. Los contactos de personas de 18 a 55 años representaron el 50% del total de contactos, con la mayoría de los contactos en entornos domésticos y de trabajo o estudio para ambas encuestas. Entre el 20% y el 40% de todos los contactos fueron con contactados de 0 a 17 años. Las medias de los contactos aumentaron para Etiopía, Ghana, Liberia, Nigeria, Sudán y Uganda y disminuyeron para Camerún, la República Democrática del Congo y Túnez entre los dos puntos temporales. Los varones tenían más contactos que las mujeres y los contactos eran uniformes en entornos urbanos o rurales (excepto en Camerún y Kenia, donde los encuestados urbanos tenían más contactos que los rurales, y en Senegal y Zambia, donde ocurría lo contrario). No hubo variaciones fuertes y congruentes en el número de contactos por nivel de educación, salud autoinformada, riesgo de infección autoinformado percibido, aceptación de la vacuna, posesión de máscaras y riesgo percibido de COVID-19 para la salud. Las medias de los contactos se correlacionaron con los informes de movilidad (coeficiente: 0.57, p = 0.051 y coeficiente: 0.28, p,= 0.291 en agosto de 2020 y febrero de 2021, respectivamente) e índice de rigurosidad (coeficiente: -0.12, p = 0.304 y coeficiente: -0.33, p = 0.005 en agosto de 2020 y febrero de 2021, respectivamente).

Conclusiones 

Estos datos demuestran que los contactos sociales en África durante la pandemia de COVID-19 fueron altos y difirieron notablemente entre y dentro de los países. Además, se encontró que el aumento de la rigurosidad y la disminución de la movilidad se asociaron con una reducción en el número de contactos. La mayoría de los contactos ocurrieron entre personas en edad de trabajar (18 a 55 años), lo que refleja las interacciones sociales generalmente más frecuentes asociadas con la participación en actividades económicas. Estos datos pueden ser útiles para comprender los patrones de transmisión, modelar la transmisión de infecciones y planificar una pandemia. Si bien las medidas de control deben implementarse adecuadamente para garantizar la adhesión, el presente estudio sugiere que pueden tener efectos limitados en la reducción de contactos en los países estudiados. Esto destaca la necesidad de desarrollar medidas de control social localmente apropiadas que sean posibles de implementar.



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