LA PRECISIÓN DE LAS PRUEBAS SEROLÓGICAS PARA DIAGNOSTICAR LA ENFERMEDAD POR CORONAVIRUS 2019

LA PRECISIÓN DE LAS PRUEBAS SEROLÓGICAS PARA DIAGNOSTICAR LA ENFERMEDAD POR CORONAVIRUS 2019


Montreal, Canadá
Las pruebas disponibles no respaldarían el uso continuado de las pruebas serológicas existentes en el punto de atención para el diagnóstico de la enfermedad por coronavirus 2019.

BMJ 370(2516):1-13

Autores:
Khan A

Institución/es participante/s en la investigación:
Research Institute of the McGill University Health Centre

Título original:
Diagnostic Accuracy of Serological Tests for Covid-19: Systematic Review and Meta-analysis

Título en castellano:
La Exactitud Diagnóstica de las Pruebas Serológicas para COVID-19: Revisión Sistemática y Metanálisis

Extensión del  Resumen-SIIC en castellano:
2.04 páginas impresas en papel A4
Introducción
El coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2, por sus siglas en inglés) sería el responsable del la pandemia de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por sus siglas en inglés). Para lograr controlar esta enfermedad sería fundamental contar con pruebas de diagnóstico precisas y rápidas. Las pruebas de diagnóstico para COVID-19 se dividen en 2 categorías principales: pruebas moleculares que detectan ácido ribonucleico (ARN) viral y pruebas serológicas que detectan inmunoglobulinas anti-SARS-CoV-2. La reacción en cadena de la polimerasa con transcriptasa inversa (RT-PCR) es la prueba de referencia para el diagnóstico de COVID-19. Sin embargo, esta prueba no estaría exenta de limitaciones. Las pruebas serológicas han generado un interés sustancial como alternativa o complemento a RT-PCR en el diagnóstico de la infección aguda, ya que algunas podrían ser más baratas y fáciles de implementar en el punto de atención. Las pruebas serológicas permitirían identificar individuos previamente infectados por el SARS-CoV-2, y por lo tanto podrían implementarse como herramientas de vigilancia para comprender mejor la epidemiología del SARS-CoV-2 y potencialmente informar el riesgo individual de enfermedad futura. El objetivo de la presente revisión sistemática y metanálisis fue determinar la precisión diagnóstica de las pruebas serológicas para el COVID-19.  

Métodos
Se realizó una búsqueda bibliográfica en las bases de datos Medline, bioRxiv y medRxiv para estudios publicados en 2020, sin restricciones de idioma, del uno de enero al 30 de abril de 2020. Se incluyeron ensayos aleatorios, estudios de cohortes o de casos y controles, y series de casos que evaluaron la sensibilidad o especificidad, o ambas de las pruebas serológicas para COVID-19 en comparación con un estándar de referencia de cultivo viral o (RT-PCR). También se consideraron los artículos remitidos por colegas o identificados en las referencias de los estudios incluidos. Se excluyeron los artículos de revisión, las editoriales, los informes de casos, los modelos o estudios económicos, los artículos con menos de 5 participantes o muestras, y los estudios que sólo informaron sensibilidad analítica. El resultado primario fue la sensibilidad y especificidad generales, estratificadas por el método de prueba (enzimoinmunoanálisis por adsorción [ELISA], inmunoensayos de flujo lateral [LFIA, por sus siglas en inglés] o inmunoensayos quimioluminiscentes [CLIA, por sus siglas en inglés]) y la clase de inmunoglobulina (Ig) detectada (IgG, IgM o ambas). Los resultados secundarios fueron la sensibilidad y la especificidad específica del estrato dentro de los subgrupos definidos por el estudio o las características de los participantes, incluido el tiempo desde el inicio de los síntomas. El riesgo de sesgo se evaluó mediante la Quality Assessment of Diagnostic Accuracy Studies 2 (QUADAS-2). La sensibilidad y especificidad agrupadas se estimaron con intervalos de confianza del 95% (IC 95%) mediante metanálisis bivariados de efectos aleatorios.    

Resultados
Se identificaron 5016 referencias y se incluyeron 40 estudios que contabilizaron un total de 73 brazos de estudio. El 70% (28/40) de los estudios fueron de China. Tanto la sensibilidad como la especificidad se informaron en el 80% (32/40) de los estudios, la sensibilidad sola en el 18% (7/40) y la especificidad sola en el 3% (1/40). La mitad de los estudios no fueron revisados por pares. La gravedad de la enfermedad se informó en el 40% (16/40) y la sensibilidad estratificada por tiempo desde el inicio de los síntomas en el 45% (18/40). Se realizaron 49 evaluaciones de riesgo de sesgo (una para cada población y método evaluado). Se encontró un alto riesgo de sesgo de selección de pacientes en el 98% (48/49) de las evaluaciones y un riesgo alto o poco claro de sesgo por el rendimiento o la interpretación de la prueba serológica en el 73% (36/49). Únicamente el 10% (4/40) de los estudios incluyeron pacientes ambulatorios. Dos estudios evaluaron las pruebas en el punto de atención. Para cada método de prueba, la sensibilidad y especificidad agrupadas no se asociaron con la clase de inmunoglobulina medida. La sensibilidad combinada de los ELISA que miden IgG o IgM fue del 84.3% (IC 95%: 75.6% a 90.9%), de los LFIA del 66.0% (IC 95%: 49.3% a 79.3%), y de los CLIA del 97.8% (IC 95%: 46.2% a 100%). En todos los análisis, la sensibilidad combinada fue menor para los LFIA, el método potencial de punto de atención. Las especificidades agrupadas variaron de 96.6% a 99.7%. De las muestras utilizadas para estimar la especificidad, el 83% (10 465/12 547) provenían de poblaciones analizadas antes de la epidemia o no se sospechaba que tuvieran COVID-19. Entre las LFIA, la sensibilidad combinada de los kits comerciales (65.0%, IC 95%: 49.0% a 78.2%) fue menor que la de las pruebas no comerciales (88.2%, IC 95%: 83.6% a 91.3%). Para los LFIA, la especificidad fue menor cuando se estimó en individuos con otras infecciones virales, pero este no fue el caso para los ELISA o los CLIA. Se observó heterogeneidad en todos los análisis. Independientemente de la clase de inmunoglobulina o el método de prueba, la sensibilidad combinada fue más baja en la primera semana de aparición de síntomas (en un rango de 13.4% a 50.3%) y más alta en la tercera semana o más tarde (de 69.9% a 98.9%).  

Conclusión
Se necesitan con urgencia estudios clínicos de mayor calidad que evalúen la precisión diagnóstica de las pruebas serológicas para COVID-19. Actualmente, la evidencia disponible no respalda el uso continuado de las pruebas serológicas existentes en el punto de atención. Se recomienda precaución si se utilizan pruebas serológicas para COVID-19 para la toma de decisiones clínicas o la vigilancia epidemiológica. La sensibilidad del método LFIA sería más baja que la de los métodos ELISA y CLIA. Para cada método de prueba, el tipo de inmunoglobulina detectada no se asociaría con la precisión diagnóstica. 
ua40317

Imprimir esta página