RECUENTO PERIFÉRICO DE EOSINÓFILOS Y MORTALIDAD EN PACIENTES CON COVID-19

RECUENTO PERIFÉRICO DE EOSINÓFILOS Y MORTALIDAD EN PACIENTES CON COVID-19


Brookville, EE.UU.
La neutrofilia y la linfopenia son anormalidades hematológicas frecuentes en pacientes con COVID-19. En estos pacientes, la eosinopenia se asocia con evolución a enfermedad crítica. Además, la eosinopenia se asocia con los biomarcadores de trastornos de la coagulación y de daño orgánico (hepático, renal y de otros tejidos).

World Allergy Organization Journal 14(3):1-12

Autores:
Tang X

Institución/es participante/s en la investigación:
Long Island University

Título original:
Relationship Between Blood Eosinophil Levels and COVID-19 Mortality

Título en castellano:
Relación entre el Recuento Periférico de Eosinófilos y la Mortalidad por COVID-19

Extensión del  Resumen-SIIC en castellano:
2.12 páginas impresas en papel A4
Introducción
Los coronavirus son virus con envoltura y causa común de enfermedad en los seres humanos. Algunos coronavirus infectan esencialmente el tracto respiratorio superior y ocasionan síntomas leves; los coronavirus humanos 229E, NL63, OC43, y HKU1 son algunos ejemplos. Tres tipos de coronavirus infectan el tracto respiratorio inferior; la enfermedad asociada puede ser fatal. Estos coronavirus incluyen el Severe Acute Respiratory Syndrome Coronavirus (SARS-CoV), el coronavirus del Middle East Respiratory Syndrome Coronavirus (MERS-CoV), y el Severe Acute Respiratory Syndrome Coronavirus 2 (SARS-CoV-2). SARS-CoV-2 es el agente etiológico de la pandemia de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por su sigla en inglés), de aparición inicial en Wuhan, China, en diciembre de 2019. Los pacientes con COVID-19 suelen presentar, como síntomas iniciales, fiebre, tos no productiva, mialgias y fatiga. Algunos pacientes refieren disnea, con progresión de la enfermedad a neumonía, síndrome de distrés respiratorio agudo, daño cardíaco agudo, infecciones secundarias y falla multiorgánica. Los índices de mortalidad, en estos pacientes, pueden ser de hasta un 21%. En enfermos con COVID-19 grave se comprueban niveles séricos elevados de marcadores de inflamación, como proteína C-reactiva (PCR), dímero-D y procalcitonina; la neutrofilia y la linfopenia también son anormalidades hematológicas frecuentes en estos enfermos. Estas alteraciones se observan en la infección por SARS-CoV y por MERS-CoV. En cambio, un hallazgo característico de la infección por SARS-CoV-2 es la declinación del recuento de eosinófilos (eosinopenia); sin embargo, los estudios previos que analizaron las posibles vinculaciones entre la eosinopenia y la gravedad de COVID-19 no mostraron resultados concluyentes. Debido a que COVID-19 puede asociarse con índices altos de mortalidad, el objetivo de presente estudio fue determinar las asociaciones entre la eosinopenia y la mortalidad por COVID-19.  

Pacientes y métodos
Los pacientes para el presente estudio fueron reclutados entre 28 de enero y 25 de marzo de 2020; los casos definitivos tuvieron diagnóstico de COVID-19 confirmado por reacción en cadena de la polimerasa en hisopado nasofaríngeo. Según las Guidelines for the Diagnosis and Treatment of COVID-19 (quinta versión), la enfermedad se clasificó en leve, moderada, grave y muy grave (crítica). Para el presente estudio se consideraron pacientes con las últimas tres formas de enfermedad en el momento de la internación. Los pacientes con COVID-19 moderada tenían síntomas de infección respiratoria, como fiebre y tos no productiva, y eventualmente síntomas y signos de compromiso del tracto respiratorio inferior, como disnea y neumonía en los estudios por imágenes. Los pacientes con COVID-19 grave presentaron frecuencia respiratoria ≥ 30 por minuto, saturación de oxígeno ≤ 93% en reposo y cociente entre la presión parcial de oxígeno arterial (PaO2) y la fracción inspirada de oxígeno (FiO2) ≤ 300 mmHg. Estos pacientes presentaban, además, lesiones pulmonares con afección de más del 50% del parénquima pulmonar en el transcurso de 24 a 48 horas. Los pacientes con COVID-19 muy grave presentaron insuficiencia respiratoria con necesidad de asistencia ventilatoria mecánica, shock, u otras fallas orgánicas. Se tuvieron en cuenta los antecedentes clínicos, las manifestaciones clínicas, los hallazgos en los estudios por imágenes del tórax, los resultados de los estudios de laboratorio y la evolución clínica. Entre los parámetros clínicos se consideraron los biomarcadores de la coagulación (tiempo de protrombina y niveles de fibrinógeno, dímero-D y productos de degradación del fibrinógeno, y el recuento de plaquetas), la función renal (urea, creatinina e índice de filtrado glomerular), la función hepática (aminotransferasas), el daño tisular (lactato deshidrogenasa, creatina quinasa y amilasa) y los parámetros de inflamación (PCR, velocidad de sedimentación globular, procalcitonina y ferritina).  

Resultados
El recuento de eosinófilos en sangre periférica fue significativamente más bajo en los pacientes con COVID-19 muy grave, en comparación con los pacientes con enfermedad moderada o grave. No se observaron diferencias significativas entre el recuento periférico absoluto y porcentual de eosinófilos entre los pacientes con COVID-19 moderada y los enfermos con COVID-19 grave. Sin embargo, el recuento y los porcentajes de eosinófilos fueron sustancialmente más bajos en pacientes con enfermedad muy grave, en comparación con los otros dos grupos. En un paso posterior se compararon los parámetros eosinofílicos en pacientes con neumonía bilateral y opacidades en vidrio esmerilado en la tomografía computarizada de tórax, respecto de pacientes con neumonía unilateral y sin este tipo de opacidades. Los primeros tuvieron recuento significativamente reducido de eosinófilos. Los hombres con enfermedad grave tuvieron recuento más bajo de eosinófilos, en comparación con las mujeres. La declinación progresiva en el recuento de eosinófilos, luego del ajuste según diversos factores de confusión (hipertensión arterial, enfermedad coronaria, diabetes y enfermedad pulmonar obstructiva crónica), se asoció con la mortalidad, en pacientes con COVID-19.El recuentode eosinófilos se asoció de manera positiva y significativa con el recuento de plaquetas y los niveles de dímero-D, pero de manera inversa con la concentración de urea, creatinina, aspartato aminotransferasa, lactato deshidrogenasa y creatina quinasa.  

Conclusión
Los resultados del presente estudio indican que la eosinopenia de agravamiento progresivo se asocia con evolución de COVID-19 a enfermedad crítica. La eosinopenia se asocia con los biomarcadores de la coagulación y de daño orgánico (hepático, renal y de otros tejidos), y predice la mortalidad.
ua40317

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