LA VACUNACIÓN CONTRA LA ENFERMEDAD POR CORONAVIRUS 2019 Y LA TRANSMISIÓN DE LA VARIANTE DELTA
Oxford, Reino Unido
La vacunación contra la enfermedad por coronavirus 2019 se asocia con una reducción menor en la transmisión de la variante delta que de la variante alfa del coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave.
New England Journal of Medicine 1-13
Autores:
Eyre DW
Institución/es participante/s en la investigación:
University of Oxford
Título original:
Effect of Covid-19 Vaccination on Transmission of Alpha and Delta Variants
Título en castellano:
Efecto de la Vacunación Contra la COVID-19 en la Transmisión de Variantes Alfa y Delta
Extensión del Resumen-SIIC en castellano:
1.95 páginas impresas en papel A4
Introducción
Antes de la aparición de la variante B.1.617.2 (delta) del coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SARS-CoV-2, por sus siglas en inglés), la vacunación contra la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19, por su sigla en inglés) redujo la transmisión del SARS-CoV-2 de las personas vacunadas que se infectaron, posiblemente al reducir las cargas virales. Aunque la vacunación aún reduce el riesgo de infección, cargas virales similares en personas vacunadas y no vacunadas que están infectadas por la variante delta ponen en duda el grado en que la vacunación previene la transmisión de la variante delta con tanta eficacia como controla la transmisión de la variante alfa y si, con una mayor transmisibilidad, la carga viral mantenida después de la vacunación explica la rápida propagación mundial de la variante delta a pesar del aumento de la cobertura de vacunación.
El objetivo del presente estudio fue investigar el efecto de la vacunación contra la COVID-19 en la transmisión posterior del SARS-CoV-2. Además, se examinó cómo varía este efecto con las variantes alfa y delta.
Métodos
Se utilizaron datos de pruebas de contacto de Inglaterra para realizar un estudio de cohorte observacional retrospectivo que involucró contactos adultos de pacientes índice adultos infectados por SARS-CoV-2 sintomáticos o asintomáticos. Los contactos eran elegibles para su inclusión en el presente estudio si se habían sometido a prueba de reacción en cadena de la polimerasa (PCR) de uno a 10 días después de que el paciente índice tuviera una prueba de PCR positiva. Se incluyeron pacientes índice que se habían sometido a pruebas entre el uno de enero y el 31 de julio de 2021. La regresión de Poisson multivariable se aplicó para investigar las asociaciones entre la transmisión y el estado de vacunación de los pacientes índice y los contactos y para determinar cómo variaban estas asociaciones con las variantes alfa y delta y el tiempo transcurrido desde la segunda vacunación.
Resultados
Entre 146 243 contactos evaluados de 108 498 pacientes índice, 54 667 (37%) dieron positivo en las pruebas de PCR del SARS-CoV-2. La mediana de edad de los pacientes índice fue de 34 años y la mediana de edad de los contactos fue de 43 años. Un total de 55 354 de los pacientes índice (51%) y 83 206 de los contactos (57%) eran mujeres.
En los pacientes índice que se infectaron con la variante alfa, dos vacunas con BNT162b2 o ChAdOx1 nCoV-19 en comparación con ninguna vacunación, se asociaron de forma independiente con una positividad de PCR reducida en los contactos (relación de tasas ajustada con BNT162b2: 0.32; intervalo de confianza del 95% [IC 95%] = 0.21 a 0.48; y con ChAdOx1 nCoV-19 = 0.48; IC 95 % = 0.30 a 0.78). No se observó una diferencia entre BNT162b2 y ChAdOx1 nCoV-19 con respecto a las disminuciones en la transmisión de la variante alfa después de dos vacunas (razón de tasa de heterogeneidad: 1.51; IC 95 % = 0.81 a 2.85).
La variante delta se asoció con más transmisión posterior de pacientes índice sintomáticos que la variante alfa, de una manera dependiente de la edad del contacto y con más transmisión posterior de pacientes índice asintomáticos que la variante alfa, independientemente del estado de vacunación del paciente y del contacto. Las asociaciones se atenuaron a medida que aumentaba la edad de contacto.
Las reducciones en la transmisión de la variante delta asociadas con la vacuna fueron menores que las de la variante alfa, y las reducciones en la transmisión de la variante delta después de dos vacunas BNT162b2 fueron mayores (cociente de tasas ajustado para la comparación con ninguna vacunación: 0.50; IC 95 % = 0.39 a 0.65) que después de dos vacunas ChAdOx1 nCoV-19 (cociente de tasas ajustado: 0.76; IC 95% = 0.70 a 0.82). La variación en los valores de umbral de ciclo (indicativos de la carga viral) en los pacientes índice explicó del 7% al 23 % de las reducciones asociadas con la vacuna en la transmisión de las dos variantes. Las reducciones en la transmisión de la variante delta disminuyeron con el tiempo después de la segunda vacunación, alcanzando niveles similares a los de personas no vacunadas a las 12 semanas en pacientes índice que habían recibido ChAdOx1 nCoV-19 y atenuando sustancialmente en aquellos que habían recibido BNT162b2. La protección en los contactos también disminuyó en el período de 3 meses después de la segunda vacunación.
Conclusiones
La vacunación contra la COVID-19 se asoció con una reducción menor en la transmisión de la variante delta que de la variante alfa, y los efectos de la vacunación sobre la transmisión disminuyeron con el tiempo. Las diferencias en las cargas virales momento del diagnóstico del paciente índice solo explicaron parcialmente la disminución de la transmisión. Las diferencias observadas entre las vacunas ChAdOx1 nCoV-19 y BNT162b2 pueden haber reflejado sus diferentes mecanismos de acción. La variante delta se ha extendido por todo el mundo y ha provocado rebrotes de la infección incluso en zonas con una alta cobertura de vacunación. El aumento de la transmisión de personas que se infectan a pesar de la vacunación es probablemente una razón importante de esta propagación. Las campañas de vacunación de refuerzo que se están considerando e implementando pueden ayudar a controlar la transmisión y prevenir infecciones.