ESTADO DE LOS MICRONUTRIENTES EN EMBARAZADAS NORMALES Y CON COLESTASIS INTRAHEPATICA

Situación del zinc, selenio y cobre en individuos sanos, enmbarazadas normales y con colestasis gravídica

Santiago de Chile, Chile

El descenso en la prevalencia de colestasis intrahepática durante la gestación en Chile coincide con mejores niveles de zinc, selenio y cobre, lo cual se corrobora incluso con variables estacionales.

 Fuente científica:  Journal of Hepatology 32542-549 aSNC

 Autores: 

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Los autores no manifiestan conflicto de intereses

La colestasis intrahepática (CIH) es una afección poco frecuente durante el embarazo, y aparece en el tercer trimeste de la gestación pero desaparece luego del parto. Su importancia radica en la asociación con prematurez y con recién nacidos muertos. Debido a que entre los múltiples factores involucrados en su aparición se encuentra el estado de algunos micronutrientes como el zinc, el selenio y el cobre, expertos de la Universidad de Chile (Santiago de Chile, Chile) investigaron si cambios estacionales en las concentraciones de estos oligoelementos coincidían con variaciones en la prevalencia de CIH durante la gestación. Las concentraciones plsmáticas de selenio en las mujeres no embarazadas estudiadas fueron más elevadas que las registradas en publicaciones previas, afirman los científicos chilenos. No obstante, en comparación con este grupo de individuos las embarazadas a término presentaron valores más bajos de selenio y zinc pero concentraciones mayores de cobre. En las embarazadas normales, las concentraciones de selenio fueron significativamente más elevadas en verano que en otras estaciones del año, en tanto que con el zinc y el cobre sucedió lo inverso. Del mismo modo que se había consignado en investigaciones anteriores, en el presente trabajo los universitarios sudamericanos establecieron la existencia de concentraciones menores de selenio en las portadoras de CIH que en las gestantes normales, a la vez que consignaron elevaciones en los niveles de cobre y zinc, los cuales se correlacionaron de manera directa con la gravedad del compromiso colestático. Con respecto al zinc, añaden, no se detectaron cambios en los casos con CIH. El estudio de tipo sección transversal se llevó a cabo sobre 21 gestantes con CIH, 98 mujeres que se encontraban cursando el tercer trimetre de embarazos normales, 29 mujeres no embarazadas y 13 individuos de ambos sexo. El método utilizado para la determinación de las concentraciones de zinc, cobre y selenio fue la espectrometría atómica, refieren los investigadores y los resultados del selenio se compararon con los obtenidos 5 a 7 años antes, siempre con la utilización de los mismos métodos de medición.Si bien la predisposición genética puede explicar la alta prevalencia en distintas aéreas geográfica determinadas y en ciertos grupo étnicos, algunas de las características epidemiológias del CIH durante la gestación señalan la existencia de factores ambientales. Aunque estos factores no han logrado identificarse fehacientemente, se considera que variables de la dieta podrían ser importantes porque influyen sobre la secreción y composición de la bilis, sobre todo durante el embarazo. Los cambios estacionales de la prevalencia, que se asocian con modificaciones los hábitos alimentarios, parecen corroborar estos aspectos. En la presente investigación se confirma una disminución en la prevalencia de CIH gestacionales asociadas a disminución en las concentraciones de selenio elevadas, ambas situaciones que se manifestan de manera concurrente en la estación estival.

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