Introducción
La infección por coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (Severe Acute Respiratory Syndrome [SARS]-CoV-2) se identificó inicialmente en la región de Wuhan, China, a finales de 2019; la epidemia se propagó rápidamente en el mundo.
Lombardía, una región del norte de Italia, se vio particularmente afectada por la pandemia de enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19 por su sigla en inglés); el primer caso en la región se comunicó el 20 de febrero de 2020.
SARS-CoV-2 puede eventualmente ser causa de enfermedad mortal; los síntomas referidos con mayor frecuencia son la fiebre, la tos, el dolor de garganta, el decaimiento, las mialgias, los síntomas gastrointestinales, la anosmia y la ageusia; los pacientes con enfermedad más grave pueden referir disnea e insuficiencia respiratoria.
Evidencia limitada sugiere que la infección por SARS-CoV-2 puede ser causa de enfermedad grave también en las embarazadas, aunque la mortalidad en estas pacientes sería muy infrecuente. Sin embargo, la mayor parte de la información deriva de estudios con metodología que podría sobrestimar los efectos deletéreos de la infección. De hecho, las mujeres asintomáticas o escasamente sintomáticas no suelen ser identificadas. Para conocer con precisión la relevancia clínica de la infección por SARS-CoV-2 en el embarazo se debe conocer el denominador real, es decir el número total de mujeres infectadas. Los estudios de seroprevalencia serían particularmente útiles en este sentido, ya que permiten identificar infección pasada, incluso en pacientes asintomáticos. En la actualidad se dispone de dos tipos de ensayos para la detección de anticuerpos contra SARS-CoV-2: unos detectan anticuerpos contra la glucoproteína de la cubierta del virus, en tanto que los otros determinan la presencia de anticuerpos contra las nucleoproteínas. Se considera que los primeros, en general, son neutralizantes; para los segundos, el papel en el control de la replicación viral todavía no ha sido definido. Incluso así, los dos son marcadores precisos de infección por SARS-CoV-2. El presente estudio prospectivo se realizó con embarazadas que dieron a luz en un amplio hospital de Milán, Lombardía, durante la primera fase de la epidemia. Todas las pacientes fueron sometidas a hisopado nasofaríngeo para determinar la presencia de virus, y en todas se tomaron muestras de sangre para conocer la presencia de anticuerpos contra SARS-CoV-2. El principal objetivo del estudio fue determinar el índice de embarazadas con exposición a COVID-19 durante la gestación. El reclutamiento tuvo lugar entre 7 de abril y 6 de mayo, de modo de analizar mujeres con posible exposición al virus exclusivamente durante la segunda etapa de la gestación.
Pacientes y métodos
De manera prospectiva se reclutaron 315 embarazadas que dieron a luz en un hospital de referencia localizado en Lombardía, Italia, en la primera fase de la pandemia de COVID-19. De esta forma se excluyeron las infecciones que ocurrieron durante las primeras etapas de la gestación. La infección se conoció por medio de reacción en cadena de la polimerasa (PCR por su sigla en inglés) en tiempo real en hisopado nasofaríngeo. Además, se realizó estudio serológico para la detección de dos tipos de anticuerpos contra el virus: contra las proteínas S1 y S2 de la envoltura viral, y contra las proteínas de la nucleocápside. Se consideró que las pacientes habían tenido infección por SARS-CoV-2 en presencia de, por lo menos, una de tres determinaciones con resultados positivos.
Se tuvieron en cuenta los antecedentes clínicos y obstétricos, entre ellos parto de feto pequeño o grande para la edad gestacional, y la presencia de síntomas sugestivos de COVID-19 en los últimos tres meses (fiebre, tos, odinofagia, rinitis, cefaleas, diarrea, vómitos, disnea, astenia, mialgias, anosmia y ageusia).
Resultados
Se analizaron 385 mujeres que dieron a luz en el período del estudio; 12 de ellas fueron excluidas porque fueron derivadas de otras instituciones por presentar COVID-19. La muestra final para los análisis abarcó 315 mujeres. En un total de 28 mujeres se diagnosticó infección por SARS-CoV-2 (8.9%, intervalo de confianza del 95%: 6.2 a 12.5%), en 13 de ellas por PCR.
Entre las 24 pacientes con infección detectada por la presencia de anticuerpos contra SARS-CoV-2, 17 (71%) tuvieron resultados positivos en las dos pruebas, 3 (12%) tuvieron resultados positivos sólo en el ensayo para la detección de anticuerpos contra las proteínas de la envoltura, y 4 (17%) sólo presentaron anticuerpos contra proteínas de la nucleocápside.
Once de 28 pacientes (39.3%) con infección por SARS-CoV-2 refirieron 1 o más síntomas sugestivos de COVID-19; cuatro pacientes tuvieron neumonía y tres de ellas requirieron asistencia respiratoria.
Las pacientes con diagnóstico de infección tuvieron con mayor frecuencia síntomas, en comparación con las enfermas sin infección. Los síntomas presentes más comunes fueron la fiebre, la tos, la disnea, y la anosmia.
Cuando se compararon las pacientes con infección por SARS-CoV-2 o sin ella no se observaron diferencias significativas para las variables de evolución obstétrica. Sólo una paciente con infección fue sometida a cesárea por presentar neumonía e insuficiencia respiratoria grave; luego del parto debió ser internada en unidades de cuidados intensivos, pero se recuperó por completo. No se registraron infecciones neonatales.
Conclusión
Los resultados del presente estudio sugieren que la infección por coronavirus 2 del síndrome respiratorio agudo grave (SRAS-CoV-2) es asintomática en 3 de cada 5 pacientes en las etapas finales del embarazo; la enfermedad rara vez es grave y la evolución de la gestación no parece comprometerse. Las embarazadas que cursan la parte final de la gestación no parecen más susceptibles a infectarse; la prevalencia observada coincidió con la de la población general de la región.