Introducción
Los efectos de diversos suplementos dietéticos sobre los niveles del colesterol asociado con las lipoproteínas de baja densidad (LDLc) han sido poco estudiados, a pesar de lo cual estos preparados son muy utilizados por la población general, con el objetivo de mejorar la salud global y cardiovascular, y de reducir la concentración de colesterol. La comercialización de los suplementos dietéticos está regulada por el Dietary Supplement Health and Education Act de 1994 (DSHEA), un organismo que asigna la supervisión de la comercialización y la promoción de estos productos a la Federal Trade Commission, más que a la Food and Drug Administration (FDA). Muchos de estos suplementos dietéticos se comercializan bajo el rótulo de alternativas naturales para la protección cardíaca y el descenso de los niveles séricos de colesterol. Muchos pacientes con hiperlipidemia utilizan estos suplementos en lugar de estatinas, a pesar de que no existen datos fehacientes que avalen este abordaje, un aspecto de gran importancia en términos de salud pública. La información en conjunto sugiere que los consumidores creen que los suplementos dietéticos son más seguros que los fármacos prescriptos; la gran mayoría también considera que estos productos son igual de eficaces o, incluso, más eficaces que las estatinas. En el contexto de la prevalencia estimada en ascenso de enfermedad cardiovascular en sujetos de los Estados Unidos se requieren conocimientos precisos acerca de los efectos de los suplementos dietéticos sobre los biomarcadores de lípidos y de inflamación. Por lo tanto, el objetivo del presente estudio fue evaluar los efectos de suplementos nutricionales de uso frecuente, respecto del tratamiento con estatinas en dosis bajas.
Pacientes y métodos
En el presente estudio realizado en un único centro, prospectivo, aleatorizado y a simple ciego se compararon los efectos del tratamiento con dosis bajas de estatinas, placebo y seis suplementos de uso habitual, en adultos sin antecedente de enfermedad cardiovascular arteriosclerótica, niveles séricos de LDLc de entre 70 y 189 mg/dl y riesgo cardiovascular elevado a los 10 años. Los pacientes fueron asignados a tratamiento con rosuvastatina en dosis de 5 mg por día, placebo o suplementos dietéticos con aceite de pescado, canela, ajo, cúrcuma, esteroles vegetales o arroz de levadura roja. El criterio principal de valoración fue el porcentaje de cambio de los niveles de LDCc respecto de los valores de inicio, en el grupo que recibió tratamiento con rosuvastatina en dosis baja, en comparación con los cambios que se registraron en el grupo placebo y el grupo que recibió cada uno de los suplementos dietéticos, a los 28 días. El criterio principal de valoración se analizó de manera jerárquica, es decir que primero se compararon los efectos de la rosuvastatina respecto de placebo y, luego, en comparación con cada suplemento, en un orden preestablecido, por medio de análisis de covarianza (ANCOVA).
Resultados
Un total de 190 sujetos completaron el estudio. El porcentaje de reducción del LDLc en el grupo de rosuvastatina fue más pronunciado respecto del observado en todos los grupos de suplementos y del grupo placebo (p < 0.001 en todos los casos).
La diferencia en la reducción del LDLc con rosuvastatina, respecto de placebo, fue de -35.2% (intervalo de confianza del 95% [IC 95%]: -41.3 a -29.1, p < 0.001). Ninguno de los suplementos nutricionales se asoció con cambios significativos en los niveles de LDLc, respecto de placebo. La frecuencia de efectos adversos fue similar en los tres grupos.
Conclusión
Los resultados del presente estudio realizado con sujetos con riesgo aumentado a los 10 años de enfermedad cardiovascular arteriosclerótica indican que el tratamiento con 5 mg diarios de rosuvastatina se asocia con reducciones sustanciales de los niveles séricos de LDLc, beneficio que no se logró con ninguno de los suplementos dietéticos analizados.