Las evidencias sugieren que los pacientes hipertensos obtendrían beneficios sustanciales con el uso frecuente de sales enriquecidas con potasio compuestas por 75% de cloruro de sodio y 25% de cloruro de potasio.
La revisión que publica la revista Hypertension * analiza las evidencias sobre los posibles beneficios y daños de los sustitutos de la sal enriquecidos con potasio incorporados al manejo clínico mediante la búsqueda sistemática de directrices para el tratamiento de la hipertensión o la nefropatía crónica.
Datos del informe mundial de la OMS referidos a ingestas de sodio. Gráfica editada en la revisión.
La ingesta excesiva de sodio e insuficiente de potasio son factores de riesgo bien conocidos para la hipertensión.
A pesar de algunas iniciativas exitosas, los esfuerzos para controlarla mediante mejoras en el consumo han fracasado en gran medida porque los cambios que se requieren son muy difíciles de implementar.
Análisis recientes de estudios controlados aleatorizados demuestran que los sustitutos de la sal enriquecidos con potasio representan una opción efectiva para mejorar los niveles de consumo y disminuir la presión arterial, así como las tasas de eventos cardiovasculares y de mortalidad. Sin embargo, estos productos no se recomiendan de manera constante y se utilizan esporádicamente.
El principal problema al intentar modificar los patrones actuales de ingesta es que, a pesar de los numerosos esfuerzos realizados durante muchos años, ha sido muy difícil cambiar el comportamiento de los consumidores, adecuar los paladares de las poblaciones, modificar el sistema alimentario o persuadir a los gobiernos en la aplicación de instrumentos reguladores frente a la continua resistencia de la industria alimentaria.
No obstante, los autores afirman que la disminución del sodio dietético y el aumento del consumo de potasio deben ser prioridades de salud pública, así como la investigación de enfoques novedosos para abordarlas. Con tal fin, realizaron un análisis de las evidencias disponibles para definir e incorporar al manejo clínico los posibles beneficios de los sustitutos de la sal enriquecidos con potasio como así también sus eventuales complicaciones.
Combinación de potasio y sodio
Estos productos se pueden utilizar directamente para sazonar, conservar y elaborar alimentos en vez de la sal común.
Desde 1995 la OMS y otras entidades internacionales han incorporado la recomendación de sustituir la sal común por productos con menor contenido de sodio enriquecidos con potasio y magnesio, con claros beneficios para disminuir la presión arterial en diferentes poblaciones hipertensas.
Entre otros, se destaca el primer Informe Mundial sobre la Hipertensión 2023 de la OMS, que específicamente afirmó que la sal enriquecida con potasio es una estrategia económica para reducir la presión arterial y prevenir los episodios cardiovasculares.
Pautas para los sustitutos de la sal
La cantidad y peso de las recomendaciones relacionadas con el aumento de la ingesta de potasio son menores en comparación con las generalizadas referidas a la disminución del sodio en la dieta por sus efectos en la elevación de la presión arterial.
En su revisión de directrices globales, regionales y nacionales sobre hipertensión y tras la búsqueda en publicaciones relevantes, los autores hallaron recomendaciones incompletas e inconsistentes sobre el uso de sustitutos de la sal enriquecidos con potasio en 32 guías de recomendaciones de manejo para hipertensión y en 14 disponibles para nefropatías.
Sales con potasio e hiperpotasemia
La hiperpotasemia es vista como una preocupación que surge con frecuencia en relación con el uso de sales enriquecidas con potasio, especialmente en el contexto de los casos con enfermedad renal crónica- En estos pacientes se aconseja evitar el potasio en la dieta, y en ocasiones, de forma más general, la recomendación se amplía a otros subgrupos de población.
La revisión más reciente de los estudios sobre la sal enriquecida con potasio no identificó ningún efecto sobre el riesgo de hiperpotasemia. Otra investigación encontró hiperpotasemia inducida por sustitutos de la sal, aunque las elevaciones sostenidas fueron infrecuentes sin efectos adversos asociados a ellas.
No obstante, los autores advierten que debido a que la mayoría de los estudios adoptaron medidas para excluir a los participantes con riesgo elevado de hiperpotasemia, faltan datos fiables sobre los efectos de la sal enriquecida con potasio en estos grupos.
Pacientes con nefropatías crónicas
La restricción del consumo de potasio en la dieta de los pacientes con enfermedad renal crónica por ser una regla vigente por años, motivó a los autores a investigar las recomendaciones relacionadas con la sal enriquecida con potasio en las pautas de tratamiento para la enfermedad renal crónica. A su vez, también revisaron datos sobre el sodio y el potasio en la dieta.
Sobre un total de 14 guías, 7 aconsejaban una dieta restringida en potasio para evitar la hiperpotasemia y sólo 4 de ellas especificaban el uso de sal enriquecida con potasio desaconsejándola en pacientes con nefropatías crónicas. Para los casos con grados más avanzados de insuficiencia renal crónica recomendaban utilizarla con precaución en personas, aunque sin restringirla en los estadios iniciales.
Definiciones del artículo
Un sólido conjunto de datos apoya la sustitución de la sal común por la enriquecida con potasio en pacientes con hipertensión. Los autores recuerdan la existencia de argumentos favorables al cambio de la sal enriquecida con potasio en la medida que puedan controlarse los riesgos de un uso indebido.
El artículo remarca que las pautas clínicas actuales ofrecen recomendaciones incompletas e incongruentes sobre el uso de sustitutos de la sal enriquecidos con potasio, así como sobre la reducción de la ingesta de sodio y el aumento de la de potasio. Por esta razón, plantean a los organismos responsables de la elaboración de pautas clínicas la necesidad de revisar lo antes posible sus lineamientos relacionados con el uso de sustitutos de la sal enriquecida con potasio.
Las evidencias sugieren que en los pacientes con hipertensión probablemente se obtengan beneficios sustanciales con el uso más extendido de sales enriquecidas con potasio con una composición de 75% de cloruro de sodio y 25% de cloruro de potasio. Los autores de actualizaciones encargados de elaborar las directrices clínicas deberían proporcionar recomendaciones coherentes sobre el uso de sustitutos de la sal enriquecidos con potasio y promoverlas activamente entre sus destinatarios.
* Hypertension
Potassium-Enriched Salt Substitutes: A Review of Recommendations in Clinical Management Guidelines
Xu X, Zeng L, Jha V y colaboradores
29 de enero, 2024