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Introducción
La polución ambientan constituye un problema importante, en términos sociales y de salud pública; además, los polutantes del aire se clasifican como agentes carcinógenos, según la International Agency for Research on Cancer (IARC).
Según estimaciones recientes de la Organización Mundial de la Salud, el 56% de las ciudades con recursos altos, con población superior a 100 000, no cumplen los requisitos para la calidad del aire. Sin embargo, los valores correspondientes para países con recursos bajos o intermedios (low-and middle-income countries [LMIC]) llegan hasta 98%; en las últimas décadas, la polución del aire ha sido aumentada a niveles muy graves. La materia particulada (MP) tiene un significado para la salud mucho más importante que el de otros polutantes; la MP se asocia fuertemente con indicadores desfavorables de salud. Estudios epidemiológicos sugirieron que la MP se asocia con riesgo aumentado de mortalidad y de morbilidad cardiovascular y respiratoria. Asimismo, la MP puede ocasionar daño de múltiples órganos y cada vez se dispone de más evidencia en este sentido para la MP con diámetro aerodinámico por debajo de 2.5 y 10 µm (MP2.5 y MP10, respectivamente).
Diversos estudios sugirieron asociaciones entre la exposición a MP y el riesgo de enfermedad cardiovascular y respiratoria. La exposición a corto plazo a MP10 y a MP2.5 ha sido vinculada con la mortalidad por enfermedad cardiovascular y respiratoria, y con la mortalidad por cualquier causa. Sin embargo, los efectos a largo plazo de la exposición a MP siguen sin conocerse con precisión. Por lo tanto, el objetivo de la presente revisión sistemática con metanálisis fue determinar estos efectos.
Métodos
Para la revisión se siguieron las pautas de 2020 Preferred Reporting Items for Systematic Reviews and Meta-Analyses (PRISMA). Los artículos publicados hasta mayo de 2022 se identificaron mediante búsquedas en PubMed, Embase y la Web of Science. Se consideraron estudios de casos y controles y de cohorte en los cuales se analizaron los efectos de la exposición a MP10, MP2.5 y MP1 sobre la morbilidad y la mortalidad por enfermedad cardiovascular o respiratoria en LMIC. Los estudios debían referir la exposición prolongada (meses a años) a MP1, MP2.5 y PM10, en μg/m3. Solo se consideraron estudios publicados en inglés con estimación de los relative risk (RR), odds ratios (OR) o hazard ratios (HR) con intervalos de confianza del 95% (IC 95%). Se tuvieron en cuenta el año de publicación, el diseño del estudio, la duración de la investigación, la exposición a polutantes, el tipo de enfermedad, el número de eventos, la evolución de salud y las estimaciones específicas de riesgo. El riesgo de sesgo se estimó con la Newcastle-Ottawa Quality Assessment Scale (NOS). Se asumió heterogeneidad importante entre los estudios, motivo por el cual se aplicaron modelos de efectos aleatorios. La heterogeneidad entre los estudios se estimó con el estadístico I2. Los factores de influencia en la heterogeneidad se identificaron con análisis por subgrupos; el sesgo de publicación se estimó con regresión de Egger.
Resultados
Se identificaron 1978 artículos, 38 de los cuales reunieron los criterios de inclusión. Los resultados mostraron que la exposición prolongada a MP2.5, MP10 y MP1 se asocia con la incidencia de enfermedad respiratoria y cardiovascular. La exposición prolongada a MP2.5 se asoció con riesgo aumentado de morbilidad cardiovascular (RR por 1.11 μg/m3, IC 95%: 1.05 a 1.17) y con la mortalidad por causas cardiovasculares (RR por 1.10 μg/m3, IC 95%: 1.06 a 1.14); además, se asoció de manera significativa con la mortalidad por causas respiratorias (RR de 1.31, IC 95%: 1.25 a 1.38) y la morbilidad respiratoria (RR de 1.08, IC 95%: 1.02 a 1.04).
Se comprobó riesgo aumentado de mortalidad por enfermedad respiratoria en sujetos de 65 años o más (RR de 1.21, IC 95%: 1.00 a 1.47) en relación con la exposición prolongada a MP2.5. Asimismo, la exposición prolongada se asoció con la morbilidad cardiovascular (RR de 1.07, IC 95%: 1.01 a 1.13), la morbilidad respiratoria (RR de 1.43, IC 95%: 1.21 a 1.69) y la mortalidad por causas respiratorias (RR de 1.28, IC 95%: 1.10 a 1.49). También se observó una asociación significativa entre la exposición prolongada a PM1 y la enfermedad cardiovascular.
Conclusión
Los resultados de la presente revisión sistemática confirman que la exposición prolongada a MP2.5 y MP1 se vincula de manera directa con la enfermedad respiratoria y cardiovascular. La MP2.5 ejerció efectos más pronunciados que la MP10, especialmente en términos de la morbilidad respiratoria.